En política no hay casualidades, es praxis de estrategias y quien mejor las construye, mejores resultados alcanza, y siempre se vende al mejor postor, aunque en algunos casos se disfraza de “coincidencias ideológicas” para obtener prebendas, ya sea en especie o de posiciones políticas, las cuales siempre están condicionadas…
Esto viene al caso por lo que acaba de ocurrir en el Senado de la República, donde el líder de los legisladores morenistas, Ricardo Monreal Ávila, claro, con el permiso de su jefe el presidente Andrés Manuel López Obrador, concertó el otorgamiento de posiciones a los partidos de la Revolución Democrática y Encuentro Social… Esto consistió en prestar senadores a ambos partidos para que lograran sumar cinco elementos y así tener derecho a más dinero, a parte de sus salarios personales, oficinas especiales y nómina para personal de ayudantía… Y a cambio de ellos, los dos partidos tendrían que votar como se les ordenara desde la bancada morenistas para aprobar o rechazar todo lo que se discutiera en comisiones y en el pleno… Pero en el camino el PRD se fue aislado de ese condicionamiento, pues llegó el momento de cobrar factura y los d senadores que le prestó el partido mayoritario regresaron a su origen y dejó a los perredistas con sus tres legisladores y con ello perdieron el derecho a ser bancada por no cumplir con el requisito de tener cinco representantes… La misma dosis se le aplicó al PES que estaba en la misma situación, tantito para que los propietarios del Senado disfracen que no se trata de revancha y tantito para sembrar la amenaza si no se cumples sus caprichos políticos… ¿Queeeeeeeee tal?... De esto hay mucho que contar…